CHANCES ARE
paso al acecho
alerta
El silencio te asista.
detrás de tu dolor ensaya
la parodia
gestos obscenos
(El silencio te asista.)
SITUACIÓN CON OBJETO
Un objeto simple, nítido, recordable. Pero que no se recuerda. Sólo se siente el paso -el peso-, la memoria del peso del objeto al pasar de una mano a la otra. Un objeto leve, límpido, del que sólo queda un blanco, ese vacío. Hasta que la memoria -su capricho- decide descubrirlo en otro objeto que no colectaría sino al cabo de las horas: Jade. Una piedra de jade. Una figurilla celta. O no. Un pendiente. No de jade sino de jadeína clara. Una figura. Rasgos apenas. Más bien el perfil (y el) pulido de la piedra. Clara.
Pero ahora la memoria, la memoria del peso del objeto, del paso del peso, leve, del objeto de una mano a otra, ha desaparecido. O no: Ha devenido color.
SITUACIÓN PARA ROMPER UN HECHIZO
Acuéstate
-boca arriba
como si fueras a morir
o a darte a luz.
Remonta
la cuesta de los años
en lo oscuro.
Llega al umbral
traspásalo / sumérgete
en la honda, estrecha, escala del olvido.
Dime qué ves.
Enfréntalo / enfréntate
a quien eras antes aun de la memoria.
¿Te reconoces?
Continúa.
Sí, reconoces ahora el camino
que te ha traído hasta aquí.
Su nitidez lo delata
-un sueño azul que se proyecta en la pantalla azul del tiempo
y va cobrando sentido.
¿Te ves?
Pregúntale por qué y acéptala
-cualquiera sea la respuesta
-He venido a decirte adiós- responde.
No digas más que eso
sin saña
sin violencia
sin rencor alguno.
Intentará retenerte
volver a responder lo que ya sabes
lo que ya le has oído
quizás de otra manera.
Baja los ojos y crea
-con la mirada sólo-
un reguero en el suelo
-un surco de tierra húmeda y cenizas.
Verás alzarse un fuego
una pared de fuego
-un fuego frío-
entre tú y tu fracaso.
Despídete.
Dale la espalda.
Vuelve a tomar el camino
-el mismo:
el sueño azul sobre el azul del tiempo.
Remonta los peldaños de la escala honda, estrecha.
Llega al umbral
traspásalo y desciende
la pendiente oscura de los años
Vuelve a tu cuerpo
¿sientes?- un dolor en el vientre o en el pecho
como si algo de ti te hubiese sido arrancado
te anuncia que has vencido.
El dolor se irá
tu quedarás contigo.
(La memoria del hueco
te seguirá adonde vayas.)
Mercedes Roffé (Buenos Aires, 1954, reside en Estados Unidos)
Fuente: "La ópera fantasma", Mercedes Roffé, Editorial Bajo La Luna, 2005.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Dejá tu comentario: