sábado, 30 de marzo de 2019

2 POEMAS DE HUGO FRANCISCO RIVELLA




VARIACIONES SOBRE UNA SOCIEDAD LÍQUIDA


                                                                                                   a Marcelo y Cris


¿Cómo llenar este vacío? -  dice Zigmunt Bauman. mientras bebe
una taza de té, apoltronado en su sillón de seda y gobelino.
El mundo no parece ser otra cosa que la Casa del Miedo,
la ventana insegura que da al Támesis, el reloj desdentado con la risa
sin tiempo,
y la calle, el hombre, las acequias,
los suburbios  tramando llegar hasta el mañana con muletas, con
tuercas,
con ruedas o rodillos,
pero teniendo en claro que todo es frágil,
penden, sobre la tierra líquida,
el mar, los sueños, la escondite de la niña y el pez, los amautas del río,
los amantes del frío,
la cruz donde la noche colgado inocentes.
Es líquida la sombra de la luna en el agua
Es líquida la mano que tatuó padeceres
Es líquida la ausencia de dios en las cantinas
Es líquida la baba del sapo enamorado.



2-


Lo sólido no existe. Existe el miedo.

Existe el mido a lo desconocido, a lo abstracto, a lo subli, a lo
dudoso.
Existe el miedo a pensar distinto,
a mirarse en los ojos de un demente,
a encontrarse en el ruido de los trenes, en el paisaje que borró la
bomba.


¿Cómo llenar este vacío?
Vuelve a preguntar Zigmunt Bauman, mientras tose una flor de
invernadero.

Lo sólido no existe.
Existe el miedo.

Todo es un tembladeral, un precipicio, una ciénaga sin límites.
Todo es como un gran ídolo de barro,
los hijos, la ciudad, el derecho a la lluvia
o escribir
en la lengua de los tigres

que el cazador le teme a las luciérnagas.



Hugo Francisco Rivella (Rosario del Frontera, Salta, 1948)

Fuente: "El Caleidoscopio del Sufriente",  Hugo Francisco Rivella, Elángel Editor, 2018.


1 comentario:

Dejá tu comentario: